Presa
Lacerada está
por los golpes
traicionada está
por culpables,
ultrajada está
por los cortes
carnaza
presta de hienas crueles.
Pobre la dama
en la desdicha,
pobre la reina
sin consorte.
Pobre la sombra
desvalida,
pobre rosal
de rosa ausente.
Con la
mordaza prieta que hiere
con la
inquina prieta en su vena,
con la bilis
dentro en su carne
vestida de hastío impotencia.
Es ya prisionera
en su celda
marfil la
custodia no duerme.
Tortura sin pausa
a su presa
presta hiere
con saña en su frente.
Aciaga hora
que nunca llega
se pierde en
los cielos sin nombre,
que se
ausenta esquiva sin roce:
sin huella ni
paso ni imprenta.
Con la
mordaza prieta que hiere
es pues prisionera
en su celda,
aciaga hora
que nunca llega.
Pobre alondra
de vuelo ausente.
Es el velo
que no se muestra.
La estaca que
sangre no vierte.
Condenada por
siempre ya presa,
cautiva en su
cárcel silente.
15-08-2015
hora: 0:32 h
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